sábado, 22 de septiembre de 2007

22 de Septiembre!

Analisis texto de Pedro Ahumada Acevedo

El autor comienza dejando en claro que la evaluación es un proceso que ha sufrido cambios a medida que la educación también cambia. Su evolución parte de juzgar el valor de las cosas. Mas adelante, el enfoque evaluativo corresponderá a medición, dándole un carácter cuantitativo este proceso. Años más tarde se enfocaría en determinados logros formulados con antelación. Luego en los setenta Stuffleban habla de la educación "como un proceso de recolección de información", método el cual facilitaría la toma de dediciones. El autor muestra los cambios que a sufrido el proceso evaluativo y a mi parecer concuerdo en que la evaluación tenga significantes cambios paralelos a modificaciones educacionales y el que el proceso nos permita desarrollar la toma de dediciones.
Dentro del texto, el autor hace hincapié a algo que se relaciona con nuestra educación. Los procedimientos utilizados en la evaluación concuerdan con la las prácticas docentes en muchos casos, pobres. La relación entre lo que dice el autor y la educación chilenística es que se considera el proceso evaluativo como un algo fuera del proceso enseñanza- aprendizaje. Debemos entonces, como futuros profesores, erradicar ese paradigma y hacer entender a nuestros alumnos que la practica evaluativa es una instancia mas de enseñanza y aprendizaje y la cual permite desarrollar habilidades, por ejemplo la toma de dediciones. Han existido avances relacionados al proceso de evaluar, sin embargo estos avances son alejados de las prácticas y formación de los profesores. Existe una clara diferencia entre teoría práctica, en otras palabras entre quienes realizan los cambios y quienes los efectúan. Esto lo podemos ver cuando docentes con mas años de servicio y los cuales fueron formados en escuela normal, aunque se les capacite para variar y fortalecer su practica evaluativa, ellos estiman que su forma de evaluar y en casos medir es la más correcta.
Según Santos Guerra se debe tener cuidado con los intentos innovadores de evaluación. Ahumada por su parte, aclara que hoy se le da más importancia al proceso de enseñanza que los resultados.Se ha resaltado en demasía la importancia a los exámenes como método de medición y no se ha hecho un estudio de la efectividad de este método de evaluación, Para ahumada se han utilizado o mal utilizado como instrumentos de selección.
Refiriéndose directamente a las pruebas se establece que la habilidad, o el rendimiento de un estudiante, corresponderá al puntaje obtenido en la prueba, La prueba debe ser preparada, realizada y expuesta de buena forma para que los resultados sean buenos. En América latina, según el autor, estos métodos son muy utilizados y sirven para seleccionar, crean una pirámide en la cual en la base están los estudiantes que ingresan al sistema y en la punta los que egresan, a mi parecer esto es muy claro en nuestro país, las pruebas y el sistema educativo hacen selección de personas, algunas obtendrán un 6.8 y egresaran y algunos con 4.0 quedaran quizás donde (selección a priori).

La disconformidad hacia las pruebas según Ahumada cada día es mayor (concuerdo con eso) es por esto y por todas las razones dadas anteriormente, que el autor se propone encontrar mejores vías para evaluar.
Ahumada, ya en el capítulo tres nos habla de un sistema alternativo de evaluación el cual intenta averiguar que sabe el alumno o que es capaz de hacer. La evaluación alternativa es un intento por hacer que el alumno refleje evidencias reales, relacionado al aprendizaje que cada materia plantee, por su parte, la evaluación auténtica busca, hacer al alumno responsable de su aprendizaje, pero como dice Ahumada esta práctica es débil ya que se quiere innovar generalmente se prefiere la practica tradicional sobre todo han profesores con muchos años de trabajo y sobre todo en chile.El profesor debe ser un mediador. En la universidad actualmente vivo esto, ya que los docentes a través de herramientas, recursos didácticos y métodos logran que nosotros (los alumnos) desempeñemos un papel protagónico en logro de aprendizajes.Los reglamentos, las condiciones laborales, horario y cantidad de alumnos pueden ser limitantes para llevar a cabo una propuesta alternativa.
A pesar de lo mucho que se quiere cambiar e innovar en evaluación sigue dándose en forma uniforme ya que existiría una gran resistencia el cambio y la innovación, fenómeno que ocurre día a día en los establecimientos de nuestro país.
Lo siguiente son algunos puntos que el autor considera necesarios para la práctica evaluativa.La evaluación debe constituir un proceso más que un suceso, más relevancia al aprender que a los resultados. Critica la evaluación de carácter acumulativo y que llega en algunos casos a transformar en exámenes finales. Ahumada nos dice que una evaluación que pase inadvertida para los estudiantes será muy efectiva.La evaluación será entonces centrada en el aprendizaje, debe apuntar al progreso en el educando, obligando al educador a poner atención en las debilidades y carencias de sus alumnos. La evaluación y el aprendizaje no se pueden separar deben estar unidos.Afirma ahumada que los nuevos procesos evaluativos deben renovar el proceso evaluación, en esto también tiene razón ya que la mayoría de los alumnos rechazamos formas de evaluar tradicionales y aburridas.
Como colofón la evaluación y el aprendizaje no pueden vivir separados y deben estar unidos con el objetivo principal el aprendizaje del alumno logrando productividad dentro de la evaluación. Esta debe ser variada, no solo pruebas escritas y orales, no solo alternativas o desarrollo, si no una evaluación que busque mejorar y orientar a los estudiantes en un proceso de enseñanza aprendizaje, que permita evaluar desempeños y competencias procurando que todos logren aprender a partir de su diversidad, que la evaluación sea un conector de experiencias previas, evidencias y vivencias personales y los conocimientos nuevos, que sea una instancia mas de aprendizaje significativo y que de pronto les sea agradable a los alumnos y no un día de juego al azar.
La evaluación nos debe retroalimentar tanto alumno como docente.